Si lo que quieres es aumentar la productividad de tus empleados y conseguir que tu empresa se posicione como una de las mejores, necesitas realizar reuniones de trabajo más efectivas. Es decir, reuniones que les permita a los empleados aprender cada vez más de área de trabajo, y resolver sus dudas para realizar de forma adecuada cada una de sus tareas.

Eso sí, ten muy presente que aprender a hacer reuniones efectivas te va a tomar un poco de tiempo y experiencia. Entonces no te desesperes si en el primer intento las cosas no salen como lo esperas, y aprende de los errores cometidos para no volver a caer en ellos en próximas reuniones. Recuerda que todos los errores e inconvenientes que tengas en el camino solo te ayudarán a formar bases sólidas para que tu empresa crezca cada día más.

Entonces, si has notado en tus últimas reuniones de trabajo que las cosas no han salido como esperabas y que los empleados no muestran ningún tipo de interés por estas, no dudes echar un vistazo a algunos de los consejos que dan los expertos. Estos te permitirán solucionar este inconveniente lo antes posible y al mismo tiempo, te ayudarán a sacar el mayor provecho de todas las reuniones que hagas.

Divide a los empleados en grupos para citarlos a reuniones

En la mayoría de los casos no necesitas la presencia de todos los empleados en una misma reunión, por lo que lo más conveniente es que los dividas en grupos. Puedes agruparlos según el tipo de proyectos que están realizando o el área de trabajo de la que hacen parte. De este modo, tus reuniones serán mucho más personalizadas y los empleados tendrán la oportunidad de hacer todas las preguntas que consideren importantes.

Aparte de esto, el hecho de hacer grupos pequeños para las reuniones te ayudará a enfocar tus reuniones en un solo tema y profundizar lo suficiente en este. Lo que significa que podrás transmitir la mayor cantidad de conocimientos a tus empleados para que aprendan de su profesión y mejoren la calidad de su trabajo.

Por último, esta medida te ayudará a que todos se interesen por lo que tienes para decir, pues les estarás ayudando a resolver dudas de sus tareas laborales. Sin contar que estarán con sus compañeros de trabajo más cercanos, por lo que se sentirán más cómodos para participar de estos encuentros. Entonces si aún no habías considerado esta opción para tus reuniones de trabajo, este es el momento apropiado para que lo hagas.

Establece un objetivo claro para cada reunión

Es muy importante que tus reuniones tengan siempre un propósito y un buen hilo conductor que te permita sacar el mayor provecho de estas. Aparte de esto, el hecho de tener un objetivo te permitirá planificar mejor tus reuniones para conseguir mejores resultados en todos los proyectos que emprendas.

Así que antes de citar a los empleados a una reunión establece un objetivo principal y varios objetivos específicos. De este modo, te será más fácil planificar los puntos de la reunión y lo mejor de todo es que podrás aprovechar mejor el tiempo destinado para esta. 

Ahora, tampoco necesitas hacer un plan demasiado completo para tus reuniones. Simplemente, necesitas identificar los puntos más urgentes a tratar y tomar estos como punto de partida para plantear los objetivos. Por esto, es muy importante que siempre estés muy bien informado sobre el avance que va presentando cada proyecto y las dificultades que van surgiendo para que puedas hacer una mejor planificación.

Involucra lo más posible a los empleados en cada actividad

Es de vital importancia que  hagas lo posible  por mantener conectados y entretenidos a los empleados durante las reuniones de trabajo. Ya que esto ayudará a que entiendan mejor la información que les das, y al mismo tiempo le dará mayores herramientas para hacer de forma adecuada cada una de sus tareas.

Aparte de esto, al involucrar más a los empleados en cada actividad planeada para las reuniones harás que estos sientan que su opinión es importante para ti. Lo cual les dará una mayor motivación para trabajar y les ayudará a tener un mejor rendimiento en su jornada laboral.

Eso sí, intenta planificar bien las actividades. Pues necesitas asegurarte de que realmente sean del interés de todos para que se puedan involucrar mejor en la reunión. Por esto, es indispensable que te tomes el tiempo no solo de conocer perfectamente los proyectos de cada grupo, sino que también conozcas los gustos y necesidades de cada uno. Esto además de ayudarte a planificar reuniones más efectivas, también te ayudará a conocer mejor tus empleados e identificar el tipo de tareas que se adaptan más a cada uno de estos.

Sé flexible

Esto quiere decir que no te apegues demasiado a tu plan inicial. Recuerda que los empleados pueden dar un giro a lo que suceda en la reunión y eso está bien, ya que son ellos precisamente quienes necesitas resolver todas sus dudas y plantear nuevas ideas para hacer mejor su trabajo. Así que si esto pasa no te frustres, y ayúdalos en lo que te pidan.

Lo que sí puedes hacer en este caso, además de resolver todas las dudas de los empleados, es brindarles la posibilidad de darte sugerencias para próximas reuniones. Ellos más que nadie conocen su trabajo y saben exactamente lo que necesitan para hacerlo bien. Entonces, deja un espacio de la reunión para recibir sugerencias o recomendaciones de todos los presentes. 

Por otro lado, es importante que estas sugerencias no queden solo en el papel. Léelas todas y selecciona las mejores para empezar a implementar los cambios que hagan falta. Así tus empleados sabrán que realmente los tienes en cuenta y que son una parte fundamental para el progreso de la empresa. Esto sin duda, ayudará a mejorar tu imagen del líder y los empleados tendrán una mayor confianza en ti, lo que te permitirá tener una mejor relación con cada uno de ellos.