Las metas SMART (Specific, Measurable, Achievable, Relevant, and Time- bound) hacen referencia a aquellos objetivos que se plantean dentro un conjunto de criterios específicos que garantizan el alcance de los mismos en un plazo determinado. Lo que significa que al aplicar este método para plantear tus metas conseguirás que estas estén más aterrizadas y que se puedan alcanzar sin problema.
Aparte de esto, las metas SMART te permitirán conocer mejor las necesidades de tu empresa y encontrar soluciones efectivas a cada una de estas. De este modo, conseguirás que tu empresa crezca cada día más y se posicione como una de las mejores del mercado.
No obstante, es muy importante que sepas plantear este tipo de metas de forma correcta para que consigas buenos resultados. Así que si estás interesado en saber cómo realizar este proceso con éxito, no dudes en echar un vistazo a las recomendaciones que aparecen a continuación.
Sé específico con lo que quieres alcanzar
Es de vital importancia que sepas exactamente lo que quieres conseguir, el problema que esperas solucionar, los pasos que debes seguir para conseguir buenos resultados, y el grupo de trabajo que va estar encargado de dicha tarea. Es muy importante que te tomes el tiempo necesario para especificar cada uno de estos puntos, pues lo que se busca es que dicha meta se pueda ejecutar de forma exitosa y que le brinde beneficios significativos a la empresa.
Por otra parte, recuerda que el equipo de trabajo que elijas para llevar a cabo dicha tarea debe contar con las capacidades y conocimientos suficientes para hacerlo de manera adecuada. Así que elige bien, ten presente que de este equipo dependerán directamente los resultados que se consigan con dicho proyecto. Por lo que no puedes arriesgarte a elegir personas que todavía no están preparadas para iniciar un proyecto de este tipo. También es indispensable que hagas una buena distribución de las tareas y que te asegures de que cada empleado puede cumplir perfectamente con las tareas asignadas. Esto te evitará muchos inconvenientes y ayudará a que el proyecto tenga el éxito esperado.
Busca objetivos medibles
Si bien es cierto que plantear objetivos específicos es fundamental para alcanzar excelentes resultados, también es muy importante que tu proyecto tenga objetivos medibles. Es decir objetivos que te ayuden a cuantificar tu proyecto y los avances que este va presentando. Esto te permitirá ver de forma clara si las cosas están funcionando como esperas o si es necesario corregir algunos puntos para que el proyecto no se estanque.
Por ejemplo, si tu objetivo es aumentar las ventas de tu negocio, necesitas tener una contabilidad clara de cada mes para proceder a realizar gráficas comparativas donde puedas ver los porcentajes. Así te será mucho más fácil darte cuenta si las nuevas medidas que implementaste están funcionando o si aún hay puntos a corregir.
Entonces, si aún no has empezado a cuantificar tus metas, este es el momento apropiado para que lo hagas. Recuerda que esto te dará datos más claros y te permitirá tomar mejores decisiones al momento de planificar tu proyectos.
Busca objetivos alcanzables
Asegúrate de que tus objetivos sean 100% realistas y se adapten perfectamente a las necesidades de tu empresa. De lo contrario, solo perderás el tiempo y tu empresa no crecerá como lo esperas. Sin contar que también perderás una gran cantidad de dinero, el cual podrían utilizar para proyectos de mayor utilidad para la empresa.
Por esta razón, es de vital importancia que antes de crear un nuevo proyecto te tomes el tiempo necesario para analizar todos los pros y contras del mismo. De igual manera, es fundamental que te reúnas con tu equipo de trabajo para que entre todos consideren las ideas planteadas y tomen mejores decisiones. Recuerda que al tener en cuenta a tus empleados en este proceso te permitirá conocer mejor la situación actual de la empresa y determinar la viabilidad de tus ideas.
Asegúrate de que tus objetivos sean relevantes
Además de buscar objetivos alcanzables también necesitas que estos sean relevantes. Es decir, objetivos que aporten algo significativo a la empresa, ya que la idea es que esta crezca cada vez y llegue a ser una de las mejores del mercado. Aunque lo que te plantees alcanzar tenga que ser realista, esto no significa que no puedas aspirar llevar a tu empresa un paso adelante de la competencia. Eso sí, ve poco a poco para que construyas bases sólidas y consigas excelentes resultados.
Entonces, lo primero que debes hacer en este caso es determinar cuál es el siguiente paso para que tu empresa empiece a progresar. Esto te permitirá enfocarte en metas realmente importantes, y en el futuro podrás ver resultados increíbles. Para esto, también es indispensable que te reúnas con tu equipo de trabajo para identificar lo que más está necesitando la empresa en este momento. Claro que puedes tener ideas, pero siempre será necesario escuchar a tu equipo para hacer un mejor trabajo.
Establece un plazo para alcanzar cada una de tus metas
Si bien es cierto que necesitas ir poco a poco para construir bases sólidas, esto no significa que no puedas establecer un plazo para cumplir con las metas planteadas. Esto es de suma importancia, ya que podrás hacer un plan de acción en el que vayas cumpliendo objetivos específicos para alcanzar tu objetivo principal.
Aparte de esto, el hecho de establecer un plazo te llevará a estar mejor organizado con cada fase del proyecto, y a distribuir de forma más adecuada las tareas entre los empleados. De esta manera, estarás aterrizando mucho más tus metas y lo más seguro es que veas avances más rápido de lo que esperas.
Por último, ten presente que para establecer los plazos de los proyectos de los proyectos necesitas analizar riesgos, dificultad de las tareas a realizar, el número de personas que van a estar a cargo de estas, etc. De este modo, conseguirás que tus metas se puedan alcanzar en el tiempo establecido y que los resultados sean los esperados.