Sobresalir en una entrevista de trabajo no es tan difícil como parece y no necesitas ser un experto para que el reclutador te tenga en cuenta para ocupar un cargo determinado. Simplemente necesitas prepararte de manera adecuada y estar dispuesto a dar lo mejor de ti para que todo salga bien.
Ahora, es posible que tengas muchas preguntas y que te sientas confundido respecto a muchos a aspectos relacionados con tu entrevista laboral, lo cual es totalmente normal. Sin embargo, es importante que aprendas a controlar muy bien tus nervios para que no te afecten al momento de presentar la entrevista y de este modo, puedas alcanzar tu objetivo.
Así que si estás interesado en saber cómo puedes destacarte en tu próxima entrevista de trabajo y ser contratado, te invitamos a echar un vistazo a los que consejos que aparecen a continuación.
Lee todo lo que puedas sobre la empresa y sobre el puesto al que aplicas
Evita a toda costa quedarte únicamente con la información que aparece en la descripción del empleo, pues al momento de la entrevista el reclutador para querer saber qué tanto conoces la empresa. Así que en el momento que sepas que tienes una entrevista accede a la página oficial de la empresa, mira las noticias que aparecen de ellos en los medios de comunicación, investiga en qué consiste el rol que quieres desempeñar. Investiga cómo funciona la empresa, los proyectos que se están llevando a cabo, la metodología de trabajo, la misión, la visión, etc.
De igual modo, recuerda que al investigar no sólo vas a estar preparado para contestar cualquier pregunta relacionada con la empresa, sino que también vas a tener una idea más clara de lo que significa ser parte de dicha entidad. Sin contar, que al estar informado te sentirás mucho más seguro al momento de la entrevista, podrás pensar con cabeza fría tus respuestas y controlarás perfectamente tus nervios.
Prepara varias preguntas para el reclutador
Es probable que luego de investigar más a fondo la empresa y el puesto que quieres ocupar surjan varias preguntas. Puede que varias de estas preguntas las puedas resolver sin preguntarle al reclutador, pero es posible que otras sólo te las pueda resolver él. Así que no te quedes con dudas y haz todas la preguntas que consideres importantes.
Eso sí, procura que las preguntas que prepares estén relacionadas con el proceso de selección y con el puesto al que aplicas. Si notas que alguna pregunta se puede prestar para malentendidos o te puede hacer quedar mal, lo mejor es que la omitas. Pues la idea es que sobresalgas como un buen candidato no que el reclutador cree una mala imagen de ti.
Mantén la conversación en términos profesionales
En primer lugar, recuerda que en la mayoría de los casos los reclutadores tienen prohibido hacer preguntas muy personales a los candidatos, pues a ellos lo único que les interesa es asegurarse de que el candidato está preparado para desempeñarse en un cargo determinado. Así que evita a toda costa hablar de más y exponer tu vida personal, esto puede ser muy mal visto y en muchos casos puede causar que te descalifiquen del trabajo.
Ahora, puede pasar que el reclutador tome la iniciativa y saque algún tema personal a flote y te haga preguntas al respecto. En este caso, ten presente que no estás obligado a dar ningún tipo de detalle, ni de hablar sobre temas que no están relacionados con el trabajo. Entonces si por algún motivo esto sucede, mantén la calma y cambia de tema de manera muy educada. De este modo, el reclutador sabrá que no te sientes cómodo hablando de este tipo de temas y que sus preguntas están fuera de lugar.
Usa ropa apropiada
Ten en cuenta que para dar una buena impresión en la entrevista necesitas empezar por vestirte de forma adecuada para la ocasión. Es muy importante que te luzcas serio y profesional, y que tu ropa esté acorde con el cargo que quieres ocupar. De igual manera, es indispensable que tu ropa refleje la cultura de la empresa, de este modo, cuando el reclutador te vea va saber que tu presentación personal es la adecuada para el cargo.
Por otro lado, es de vital importancia que tú te sientas cómodo con la ropa que te pongas. Es posible que tengas que cambiar un poco tu estilo de vestir para adaptarte al de la empresa, pero esto no significa que tengas que estar incómodo. Recuerda que si te sientes incómodo con la ropa, también te vas a sentir muy mal durante la entrevista y esto puede hacer que los nervios aumenten. Lo cual va a afectar de manera significa tu desempeño en la entrevista.
Llega 10 o 15 minutos antes
En primer lugar, el hecho de ser puntual hablará muy bien de ti y te ayudará a ganar puntos con el reclutador. Pues aunque no te cruces con él cuando llegues, te presente que la mayoría de los reclutadores al terminar las entrevistas hablan con la persona de la recepción para averiguar a qué hora llegaron los candidatos y cuál fue su comportamiento. Así que evita a toda costa llegar tarde, y días antes de la entrevista averigua la dirección exacta de la empresa y si tienes la posibilidad ve hasta allá para asegurarte de que no vas a tener ningún problema para llegar a tiempo el día de la cita. Igualmente, planea muy bien tu día y determina el tiempo que necesitas para llegar temprano, ten en cuenta el tráfico, y la distancia que hay de tu casa a la empresa, para que todo salga bien.
En segundo lugar, al llegar temprano a la entrevista podrás analizar el ambiente laboral de la empresa, el funcionamiento de la misma, la relación que tienen los empleados, entre otras cosas. Lo que sin duda, te dará una idea más acertada del lugar donde quieres trabajar y te ayudará a estar mejor preparado para el momento de la entrevista.