Los acontecimientos del día a día están llenos de drama, confusión, miedo, estrés y sobre todo incertidumbre. Todo esto puede causar un increíble daño en la productividad y en la moral de un profesional dedicado a su trabajo.
Un líder apropiado siempre pone orden a este tipo de caos, calma la situación cuando está tensa, apacigua los nervios de las personas de su entorno, brinda esperanza de un resultado exitoso y logra poner a trabajar a todos para alcanzar dicho resultado imaginado tan atractivamente.
Como todo líder, debe tener un locus externo que lo identifique como apropiado para una situación determinada y por supuesto para un grupo de trabajadores. De esta manera, aquí podrás identificar 6 síntomas de que eres un líder apropiado para estos tiempos tan difíciles:
1. La facilidad de comunicarse
Un líder apropiado nunca trata de engañar a la gente, sino más bien trata de hacerle llegar a las personas la verdad de una manera adecuada y un poco fácil de comprender. Un líder puede detectar una mentira a una milla de distancia y sobre todo dejarla en descubierto ante todos.
Para hacer un buen trabajo de líder deberás decirles a las personas lo que sabes, puesto que todos necesitamos información y sin ella solo aumenta la ansiedad y el estrés. Al crear un ambiente estresante no se obtendrán buenos resultados y puede que tu labor termine saliendo mal ejecutada.
De la misma manera hay que decir lo que no sabes, pues siendo honesto se logran muchas cosas. Si no eres honesto con el grupo al cual lideras, pensarán que estás reteniendo información importante o peor aún, podrán pensar que no eres bueno en absoluto o que estás perdiendo la dirección en tu labor.
Decirles a las personas cuando podrás tener conocimiento acerca de un dato en específico calmará mucho más la situación. Un líder apropiado proporciona una línea de tiempo para poder buscarle respuestas a las interrogantes demandadas. Tener noción del tiempo en el que algún problema termine, calmará el estrés y la ansiedad de los trabajadores.
2. Tienen a la mano un plan explícito
El resto de los asociados siempre esperarán que tu como líder ofrezcas un plan, que presentes planificaciones previas acerca de lo que se debe hacer y que expliques el por qué hacer las cosas de una manera y no de otra. La lógica debe ser directa, pues al proporcionar la idea claramente de los beneficios que se podrán obtener, todo será mucho más eficiente.
Las personas no harán pregunta cuando ven a un líder bien preparado, con los pies en la tierra y con un plan de acción con bases. El trabajo se podrá realizar con mayor fluidez cuando el plan está elaborad considerando la capacidad de cada uno de los integrantes del grupo.
Ser transparente es importante en tu rol de líder, pues esto te generará confianza y en los momentos de estrés, la confianza es una gran herramienta para poder solventar cualquier inconveniente.
3. Facilidad de pedir información
Como líder, no debes esperar tener todas las respuestas o todas las ideas, lo que si se espera siempre de ti es abordar el mejor plan basado en toda la información proporcionada por los contribuyentes.
Cuando un líder no busca informarse pierde potencial, debido a que la obtención de la información es vital para cualquier paso a ejecutar dentro de un proyecto o un trabajo determinado. La solución de los problemas se fundamenta básicamente en la calidad de la información obtenida.
También, debes dejar que los demás integrantes participen, pues así todos podrás saber que eres un líder capaz de recibir información, que eres un líder abierto a las ideas e iniciativas y sobre todo que eres un líder que inspira confianza. La sensación de impotencia por parte de los trabajadores puede anularse cuando se les deja opinar en un tema importante o crucial.
4. La capacidad de ser flexibles y adaptables
Es posible que en algún momento llegue un comunicado de que el nuevo trabajo a ejecutar será un desafío, aquí es exactamente donde un líder apropiado se muestra flexible y se adapta a la situación que lo requiere.
La mente abierta proporciona mayor rapidez para poder solucionar un inconveniente, no solo se debe optar a apegarse al plan A sino también tener más planes bajo la manga, un plan B o un plan C que puedan incrementar la seguridad con más garantías.
Como líder, deberás ser flexible y capaz de adoptar mejores soluciones, inclusive si dichas soluciones no fueron propuestas por ti mismo. El objetivo de un buen líder siempre es salir adelante sin importar las condiciones y con el mejor ritmo posible.
5. Es positivo
Mantener la confianza en una persona en especial dentro del grupo es importante si eres un líder, pues pueden surgir algunas situaciones en las que tengas que disponer de esa persona para poder continuar con tu labor. En momentos de duda es crucial tenerle confianza a alguno de los trabajadores, así se pueden solventar problemas con mayor rapidez.
El equipo en general quizás no llegue a saber la solución a un problema, pero al contar con un miembro más a parte del líder proporciona cierta calma y da la esperanza de poder lograr dicha solución.
Proyectar confianza para construirla es una de las cosas más importantes que debes hacer como líder, según lo establece Robert Louis Stevenson, hay que mantener los temores dentro, pero compartir lo aprendido de ellos con los demás. Este gran consejo ayuda para mantener el equilibrio en una buena labor grupal, mantiene la confianza y proporciona la solución de problemas más intrínsecamente.
6. Es capaz de crear pequeñas victorias
Un buen líder siempre consigue pequeñas victorias para su equipo, ayuda a solventar problemas y demandas con rapidez y facilidad. Estos objetivos que se deben lograr inmediatamente deben ser significativos y hay que celebrarlos para ayudar a aumentar la confianza, la moral y crear un vínculo seguido de un estímulo para continuar una labor productiva.
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