Cómo demostrar tu productividad al trabajar a distancia

En los últimos meses el trabajo a distancia se ha vuelto mucho más frecuente que en otros años, y al parecer en 2021 esta tendencia seguirá en aumento. Pues para las empresas lo más importante es la seguridad y el bienestar de sus empleados, así que aquellos que puedan trabajar desde casa no tendrán que asistir a las oficinas a menos que sea estrictamente necesario.

No obstante, para algunos empleados trabajar desde la comodidad de su hogar puede ser una desventaja, pues al tener muchos distractores a su alrededor la productividad va a disminuir de manera significativa. Situación que puede llevar a estos empleados a perder su trabajo más pronto de lo que imaginan. 

De igual manera, se puede presentar una situación contraria, el empleado al trabajar desde casa pasa más tiempo del estimado frente a su computador tratando de adelantar el mayor número de tareas posible. Dejando a un lado su descanso y quehaceres diarios. Lo que no sólo va a afectar su desempeño, pues va a estar más cansado de lo normal, sino que también va a afectar su salud.

Así que si sientes que para ti también puede ser difícil tener un buen desempeño como empleado trabajando desde casa y encontrar un buen equilibrio entre tu trabajo y tus tareas cotidianas, no dudes en echar un vistazo a los consejos que aparecen a continuación para que sigas demostrando que eres el mejor en tu área de trabajo.

Sé honesto con el tiempo que tienes disponible

Uno de los mayores errores que suelen cometer los empleados al trabajar a distancia es no establecer un horario de trabajo. Pues no se trata de trabajar menos o más, se trata de trabajar el tiempo justo. Por este motivo, es de vital importancia que tengas una agenda donde organices tu jornada laboral y tus actividades cotidianas para que consigas un buen equilibrio y alcances rápidamente cada uno de tus objetivos. 

Ahora, puede que te estés preguntando ¿y si mi jefe me pide que trabaje hasta más tarde? ¿y si tengo que entregar algo urgente? y por supuesto que esto puede pasar. El punto es que no necesitas sacrificar ni tu tiempo de descanso y el tiempo de calidad con tus seres queridos para demostrar que eres un buen empleado. 

Tampoco necesitas ser grosero con tu jefe y decirle que tú también tienes una vida y que no todo tiene que ser trabajo. Simplemente necesitas ser honesto con el tiempo que tienes disponible y si crees que es necesario contarle a tu jefe un asunto personal que sea importante para que él te pueda entender cuando le digas que no vas a realizar una tarea extra, no dudes en hacerlo. Eso sí, también puedes hacer alguna excepción y trabajar un poco más de tiempo, pero procura no sea siempre así. Tú también tienes problemas y necesidades que atender y no puedes descuidarlas por quedar bien con tu jefe. 

Haz una lista de deberes que se adapte a tus necesidades

Hacer una lista de tareas para cada día además de ayudarte a ser más productivo y a no olvidar deberes importantes, también te permitirá identificar tus prioridades como empleado. De este modo, podrás eliminar definitivamente aquellas tareas que no te aportan nada y que solo te quitan tiempo valioso y enfocarte en aquellas tareas que te ayuden a aprender cada vez de tu campo de trabajo. Así mismo, es de vital importancia que al momento de planear tu jornada laboral tengas en cuenta el tiempo que necesita cada tarea, ya que la dificultad de estas puede variar y si lo que quieres es hacer un buen trabajo necesitas dedicar el tiempo suficiente a cada una de estas. 

Por otra parte, evita a toda costa saturar tu lista de labores, intenta ser lo más honesto posible con tus capacidades y los objetivos que te traces. Recuerda que no se trata de terminar todo en el menor tiempo posible, sino de hacer las cosas bien en el tiempo justo. Es mejor que incluyas pocas tareas y sepas que las puedes terminar sin problema, a que seas muy ambicioso y al final no termines nada.

Por este motivo, es muy importante que antes de hacer tu lista establezcas un plazo para finalizar cada tarea. Así tendrás total seguridad de que vas a terminar todo en el tiempo estimado y además, tendrás una idea más clara del número de tareas que puedes hacer por día. Lo que significa que aprenderás a organizar mejor tu tiempo y tu productividad aumentará significativamente.

Utiliza herramientas colaborativas

Las herramientas colaborativas te permitirán mejorar tus habilidades para trabajar en equipo, te ayudarán a resolver dudas de forma rápida y efectiva, y por si fuera poco te ayudarán a ver un progreso en tu trabajo. Así que si la empresa donde trabaja cuenta con alguna de estas plataformas no dudes en sacar el mayor provecho de esta, y en caso de que aún no se haya implementado este sistema de trabajo, invita a tu equipo a utilizarla. De esta manera, todos estarán conectados en todo momento y en caso de que surja algún problema podrán resolverlo rápidamente. 

En la web podrás encontrar muchas herramientas para hacer trabajo colaborativo 100% gratuitas y efectivas. Entonces si aún no has comenzado a utilizar una de estas, este es el momento adecuado para que descargues un buen software de gestión de trabajo y empieces a disfrutar de todos los beneficios que este te puede ofrecer.

Ten presente que este tipo de software no sólo es bastante efectivos para trabajar en equipo sino que también te ayudará muchísimo a mejorar tus capacidades como profesional. Entonces si tu trabajo es más individual que colaborativo no te desanimes, este tipo de herramientas también están diseñadas para facilitarte la elaboración de tus labores diarias y para ayudarte a aprovechar tu tiempo al máximo.

Por último, recuerda que al organizar tu trabajo ya sea en una agenda o en un programa especializado necesitas incluir varias pausas activas. En estas pausas podrás despejarte un poco y recuperar energía para continuar con tus labores. De lo contrario sólo te vas a estresar y te será mucho más difícil finalizar tus tareas.

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