Cómo encontrar motivación cuándo no encuentras tu trabajo apasionante

Sin importar el trabajo que tengas, siempre tendrás que enfrentarte a nuevos retos y a situaciones difíciles de resolver. Así que evita pensar que por tener el trabajo ideal te librarás de tener problemas o que siempre vas a estar feliz y con toda la disposición para superar todos los obstáculos que se crucen en tu camino. Si bien es cierto que trabajar en lo que te gusta te motiva mucho más a dar lo mejor de ti y a tener un buen desempeño, también es cierto que si no manejas el estrés de forma adecuada y si no tienes buenas estrategias para trabajar puedes llegar a desanimarte un poco y a disminuir tu productividad.

Por esta razón, es muy importante que siempre intentes mantener viva la motivación para que tu trabajo fluya mucho mejor, y al mismo tiempo, para que puedas pensar con cabeza fría en situaciones complicadas y así, encontrar soluciones adecuadas. Claro que no todos los días vas a estar motivado, pero sí puedes intentar cambiar lo que no está funcionando y mejorar tu experiencia como trabajador.

Entonces si consideras que la falta de motivación está afectando tu desempeño, echa un vistazo a los tips que te presentamos a continuación para que soluciones esta dificultad lo antes posible.

Invierte tu tiempo de forma inteligente

En este punto, es fundamental que crees una agenda con cada una de las tareas que debes realizar y los plazos de entrega, y de acuerdo a esto distribuyas tu jornada laboral. De esta manera, evitarás omitir tareas importantes y no perderás tiempo al llegar a tu trabajo, intentanto recordar lo que tienes que hacer. Así que procurar programar muy bien tu agenda semanalmente y al final de cada jornada haz las modificaciones que sean necesarias para la agenda del siguiente día. Pues es posible que tu jefe te cambie un poco los planes y te asigne nuevas tareas y te libre de otras.

De igual manera, cabe destacar que antes de hacer tu agenda es indispensable que hagas una selección de las tareas más importantes, es decir, aquellas tareas que realmente van a sumar en tu trabajo y que te permitirán avanzar. Esto no sólo te permitirá librarte de actividades que no tienen ninguna relevancia, sino que también te ayudará a dedicarle más tiempo a las tareas que verdaderamente importan. Lo cual, será de gran ayuda para que la calidad de tu trabajo mejore y para que te destaques mucho más como empleado.

Por último, procura ser realista con el tiempo que le asignas a cada actividad, ya que esto te ayudará cumplir con mayor facilidad tus metas, y al mismo tiempo, te permitirá trabajar mucho más tranquilo. Así que identifica las tareas que puedes hacer más rápido, aquellas a las que le debes dedicar más tiempo, y las que no tienes muy claro cómo llevar a cabo y necesita preguntarle algunas cosas a tu jefe. Esto te dará una idea de cuánto tiempo le puedes dedicar a las actividades y del grado de dificultad que tiene cada una.

Crea hábitos sencillos para mejorar tu productividad

Cada día, antes de empezar a trabajar haz alguna rutina de estiramientos que te ayude a relajarte un poco, tómate un té tranquilizante, y si tienes la posibilidad haz un poco de meditación para que despejes tu mente y empieces con la mejor disposición tu jornada laboral. Ahora, también es fundamental que mientras trabajas te tomes algunas pausas activas para que descanses un poco y recuperes energías para continuar. Así que no olvides incluir estas pausas en tu agenda.

Igualmente, es fundamental que elimines todo tipo de distractores para que aproveches al máximo tu tiempo y aumentes tu productividad. Para empezar, puedes crear filtros en tu correo electrónico para que te notifique únicamente los mensajes que son importantes para tu trabajo, o si lo prefieres crear un correo que sea solamente para asuntos laborales. De este modo, evitarás distraerte con otro tipo de mensajes que no te aporten nada en tus labores.

Por otra parte, es muy importante que dejes tu celular guardado en tu locker y que lo revise únicamente cuando sea hora de almorzar, o al finalizar tu jornada laboral. Ahora, si es estrictamente necesario que tengas tu celular a la mano desactiva el wifi mientras trabajas y revisalo solo cuando recibas alguna llamada. Recuerda que tu celular puede ser uno de tus más grandes distractores así que entre más limites su uso, mucho mejor. Así mismo, evita hablar demasiado con tus compañeros, a no ser que sea necesario, de lo contrario evitar perder el tiempo hablando de cosas completamente ajenas a tu trabajo.

Otro hábito que te puede ayudar muchísimo es empezar siempre tu jornada laboral con las asignaciones de mayor dificultad. Ya que cuando inicias el día es cuando tienes más energía y cuando más se te facilita pensar de forma clara, por lo que te será más fácil terminar de manera exitosa. De esta manera, en la segunda parte de tu jornada, cuando estás más cansado, podrás dedicarle tiempo a las actividades que no son tan complicadas y trabajarás más cómodo.

Cuida tu salud

Recuerda que si no cuentas con una buena salud mental y física te va ser mucho más difícil realizar de manera apropiada tu trabajo. Por lo que antes de pensar en cómo aumentar tu productividad necesitas en qué hábitos saludables puedes adquirir y qué hábitos necesitas cambiar para que tu salud mejore.

Para comenzar, lleva una dieta balanceada que te ayude a recibir todos los nutrientes necesarios para que tu cuerpo se mantenga en perfecto estado. Igualmente, intenta hacer al menos 10 minutos de ejercicio diariamente, esto no sólo te relajará, sino que también te ayudará a estar más activo y con mayor energía en tu trabajo. Del mismo modo, intenta dormir de 6 a 8 hora diarias para que no tengas sueño en el trabajo y presentes un buen rendimiento.

Por último, aprende a controlar tus emociones. Claro que todas las personas tienen problemas y esto puede llegar a desanimarlas, pero de cada uno depende que los problemas no lo afecten más de lo debido. Entonces no dejes que los problemas te superen, intenta mantener siempre una buena actitud, y lo más importante, separa tus emociones y tus problemas personales de tu trabajo. También, procura rodearte siempre de personas positivas y evita tocar temas que puedan generar algún conflicto para que te mantengas tranquilo y las cosas en tu trabajo fluyan sin ningún problema.

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