Es posible que al enfrentarte a un nuevo empleo te sientas un poco nervioso, pues tendrás que lidiar con un nuevo jefe, convivir con nuevos compañeros de trabajo, adaptarte a nuevo ambiente laboral y cumplir nuevas reglas. Sin embargo, conseguir que el proceso de adaptación sea mucho más ameno, depende únicamente de la actitud que tengas y de lo cómodo que te sientas trabajando en la compañía. Por lo que es muy importante que antes de postularte para un nuevo empleo, analices cuales de tus fortalezas y talentos te servirán para tener un buen desempeño.
Ten presente que el hecho de encontrar un trabajo donde puedas sacar a flote tus mejores armas, no solo te ayudará a superar fácilmente las dificultades que se te presenten en el camino, sino que también te servirá para crecer como profesional. Lo cual, te permitirá impresionar a tu jefe y al mismo tiempo convencerlo de que no se equivocó cuando te eligió para desempeñarte en dicho cargo.
Si estás considerando la posibilidad de postularte para un nuevo empleo, te invitamos a leer los consejos que te damos a continuación para que utilices todas tus fortalezas a tu favor y te destaques por tu excelente trabajo.
Conoce mejor tus fortalezas
Recuerda que en este caso, las fortalezas que necesitas identificar son aquellas que te han inculcado desde pequeño y aquellas que la vida te ha enseñado. Estas pueden ser, la responsabilidad, el compromiso, la capacidad para trabajar en equipo, la facilidad para adaptarte a nuevos ambientes, la honestidad, el respeto, la tolerancia, entre otras.
Cuando tengas claro cuáles son tus principales fortalezas, piensa en tu carrera y determina hacia dónde quieres enfocarte. Igualmente, analiza de qué manera puedes ayudar a que la compañía donde quieres trabajar crezca y sea exitosa. De este modo, sabrás si realmente estás preparado para alcanzar las metas que te pide la empresa y además te sentirás mucho más motivado para realizar un buen trabajo.
Por otro lado, recuerda que el hecho de sentirte satisfecho y contento con tu trabajo es fundamental para que todo lo que realices en tu trabajo salga a las mil maravillas. Aún si hay problemas, no te quedarás triste pensando que ya todo está perdido, sino que hará todo lo que esté a tu alcance para encontrar una solución adecuada.
Por esta razón, si sientes que el trabajo al que vas a aplicar no te va hacer feliz y que además no estás preparado para enfrentar los desafíos que se crucen en tu camino, no dudes en buscar un nuevo empleo. Te estarás librando de muchos problemas y aparte de esto, cuando busques un trabajo, te sentirás más seguro de lo que quieres.
Aprende a controlar tus debilidades
En lugar de quejarte todo el tiempo y enfocarte únicamente en tus defectos, o sentirte mal por no ser el mejor, busca estrategias que te ayude a manejar todo aquello que te afecta. Por ejemplo, puedes empezar a por verle el lado bueno a tus debilidades, puede que lo que para ti sea malo, para tu futuro jefe no lo sea. Así que analiza muy bien tu listo de debilidades y determina cuales de estas puedes utilizar a tu favor. Probablemente te sorprendas al darte cuenta de que no todo es tan malo.
Otra estrategia que te puede ser de gran ayuda es implementar técnicas que te ayuden a superar esos defectos que no te dejan avanzar en tu trabajo. Supongamos que tiendes a olvidar fácilmente las cosas y que debes estar pendiente de muchos aspectos durante tu jornada laboral. En este caso, puedes poner recordatorios en tu celular para que no se pase la hora de realizar alguna actividad o cumplir con un compromiso.
De igual manera, puedes hacer notas y pegarlas en tu escritorio con todas las tareas que debes realizar. Esto te permitirá tener más presente todo lo que necesitas hacer y al mismo tiempo te servirá en gran medida para aprovechar mucho más tú tiempo.
Por otra parte, si te caracterizas por llegar tarde, empieza por poner más temprano tu despertador y así evitar levantarte tarde. También, asegúrate de colocar el despertador lejos de tu cama para que te veas obligado a levantarte para apagarlo. Pues si lo pones al lado te tu cama tienes la tentación de programarlo para que suene 5 minutos más tarde y quedarte dormido. Así no estarás pensando que te dejo el bus o en que no alcanzaste a arreglarte o a preparar tu desayuno o el almuerzo para llevar a la oficina.
Saca el mayor provecho de tus fortalezas
Si te enfocas en sacar a flote todas tus fortalezas y además buscas estrategias para superar las dificultades que enfrentas, podrás destacarte mucho más y con el tiempo te convertirás en un excelente trabajador. Aparte de esto, si tu trabajo encaja perfectamente en tus habilidades y tu jefe reconoce que tienes un gran potencial para ofrecer a la empresa, puedes sentirte mucho más satisfecho y sobre todo feliz con lo que haces.
Es muy importante que utilices tus mejores armas para sobresalir y que identifiques las oportunidades que tengas para aprovechas todos tus talentos. Posiblemente en la empresa donde trabajas se lleven a cabo varios proyectos, busca el que más te convenga y hazle una buena propuesta a tu jefe para que te deje trabajar en él. Haz todo lo posible para que tu propuesta sea tentadora y a tu jefe no le quede ninguna duda de que puedes aportar demasiado a dicho proyecto.
Adicionalmente, busca que tus fortalezas sean productivas y que generen un impacto positivo en tus labores diarias. Para esto, es fundamental que planifiques muy bien tu agenda y que evites a toda costa malgastar tu tiempo. De igual manera, asegúrate de fijar muy bien tus objetivos y concéntrate únicamente en cumplirlos. Si tienes la posibilidad, pide la opinión de tus compañeros o de tu jefe sobre tu desempeño y los proyectos que realizas, esto sin duda te ayudará a perfeccionarte cada día más.