Los equipos de trabajo están presentes en cuanta organización existe, y para que el mismo sea funcional evidentemente se debe trabajar en equipo. Esto es algo que se dice fácil, sobre todo por la creencia de que un equipo es tan inteligente como los miembros que lo conforman pero esto no necesariamente es así. Diversos estudios han revelado que más que la inteligencia media de los miembros de un equipo lo que define la inteligencia grupal es la capacidad que tengan de escucharse entre sí los miembros que lo conforman, es por ello que te presentamos los 8 consejos para escuchar mejor, la habilidad clave en los equipos de trabajo.
1. Que los miembros del equipo tengan sensibilidad al escuchar
Esto es beneficioso no solo para aquel que exponga las ideas sino también para el que las escucha, ya que hará que la información fluya correctamente entre cada uno de los miembros del equipo y de esta manera tomar mejores decisiones y encontrar las soluciones más óptimas para cualquier tipo de problemas.
Este estudio realizado por Anita Williams Woolley de la universidad Carnegie-Mellon, Christopher F. Chabris de Union College, y Alexander Pentland, Nada Hashmi y Thomas W. Malone del MIT determinó que la sensibilidad que tengan los miembros del equipo para escucharse influirá mucho más en la inteligencia general del grupo que cada coeficiente intelectual individual que posean dichos miembros. Entre los resultados también se destacó el hecho que la presencia de mujeres en los equipos de trabajo también es beneficiosa.
2. Incluir mujeres en los equipos de trabajo
Otro de los factores que influyen directamente en la habilidad de escuchar dentro de los equipos de trabajo es la presencia de mujeres en el mismo. De acuerdo al estudio de investigación mencionado anteriormente, la presencia de mujeres en un equipo de trabajo influye en la sensibilidad para escuchar de sus compañeros del sexo masculino. Esto se traduce en que la presencia de las mujeres en los equipos de trabajo impactará de forma positiva la inteligencia general del equipo, por lo que se recomienda que sean incluidas en los mismos.
3. Que todos los miembros del equipo tengan igual derecho de palabra.
Es de suma importancia que cada miembro del equipo tenga su turno para expresar sus ideas, acuerdos y desacuerdos, de esta manera todos se sentirán escuchados y disminuirán los pequeños inconvenientes que puedan ocasionarse con aquellos miembros autocráticos y ególatras que no cedan derecho de palabra ni acepten críticas sobre sus ideas. Sin estos inconvenientes se ahorrará tiempo y esfuerzo, a su vez que mejorará la calidad y capacidad del equipo para solucionar problemas.
4. No juzgar o analizar mientras los demás miembros del equipo expongan sus ideas
Otro de los consejos para escuchar mejor es que aunque muchas veces se esté en desacuerdo con lo que proponen uno o más de los miembros del equipo, es importante no interrumpirlos ni juzgarlos mientras estos dan a conocer sus ideas ya que creará tensión en el expositor y se perderá el enfoque de la información que se estaba transmitiendo. Es por ello que se debe escuchar atentamente y tratar de colocarse en la posición del compañero que expone su idea para intentar entender su punto de vista y en lugar de negarse directamente a su propuesta, es probable que surja una nueva y mejor abarcando los distintos puntos de vista de cada integrante del equipo.
5. Para escuchar bien no basta con solo quedarse callado
Quedarse callado mientras otro compañero habla le da la oportunidad de expresar su opinión respecto a algún tema, pero quien calla no necesariamente escucha. Alguien callado podría estar pensando en las compras, en sus hijos o en cualquier otro tema fuera del equipo, por ello es necesario asentir y utilizar palabras cortas como “ok”, “bien”, “así” que denoten una actitud positiva y receptiva a la idea que se expone. De esta manera el expositor se sentirá escuchado y aceptará de forma más abierta las críticas y propuestas que puedan surgir sobre sus ideas.
6. Repita lo dicho por el compañero de forma que no moleste
Aunque pueda parecer molesto, parafrasear la idea desde su marco de referencia es uno de los mejores consejos para escuchar mejor. Esto le mostrará al equipo su enfoque sobre lo que se expuso y que tan clara fueron las ideas, además del hecho de hacer sentir escuchado a quien las expuso. Esta técnica es tan efectiva que incluso es utilizada fuera del entorno empresarial ya que la mayoría de las negociaciones policiacas la utilizan para la liberación de los rehenes de acuerdo a lo dicho por Gary Noesner, ex negociador jefe del grupo de respuesta de incidentes críticos del FBI y autor de “ganar tiempo: Mi vida como un negociador de rehenes del FBI”
7. Haga preguntas sobre la idea expuesta
Esto es ampliamente beneficioso para todo el equipo, ya que primeramente aclarará cualquier duda que tenga sobre la idea expuesta y le hará comprender mejor el punto de vista del compañero expositor, además de esto podrá aclarar cualquier duda o mal entendido que haya tenido algún otro miembro del equipo y que no haya preguntado por diversas razones. No conforme a esto, el compañero que expuso sus ideas se sentirá escuchado por todo el equipo por lo que estará más dispuesto a la “negociación” de su idea y aceptará la decisión grupal sin muchas objeciones.
8. Actitud positiva en todo momento
No es lo mismo decir un “No” a decir un “Si, pero…”, la negatividad predispone las discusiones y en un equipo de trabajo discutir significa perder tiempo valioso. Todo esto se puede evitar con una actitud positiva y buena receptividad sobre las ideas que exponen los otros miembros del equipo, siempre resaltando los aspectos positivos de sus ideas sobre los negativos y utilizando el lenguaje corporal para expresar receptividad. El compañero se sentirá tomado en cuenta y cuando se utilicen frases como “Tu idea es excelente, pero…” podrá visualizar de mejor manera la parte negativa de lo que expuso sin llegar a sentirse ofendido y en lugar de ello proponer otro tipo de soluciones que mejoren notablemente su idea original.
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