Las 8 cualidades que debes tener para ser un líder, según Warren Buffett

El reconocido filántropo y empresario Warren Buffett, es según la revista Forbes es uno de los mejores negociantes que hay en el mundo. A sus 89 años, el empresario sigue muy activo en el mundo de los negocios, y sigue ofreciendole al mundo ideas increíbles para crecer como empresario. 

Así que si eres el líder de tu empresa y te interesa mejorar tu labor y crecer como profesional, conocer las ideas de Warren Buffett es algo que te va a ayudar muchísimo a alcanzar este objetivo. Entonces, si te interesa conocer las cualidades que debe tener un buen líder, según este gran empresario, te invitamos a echar un vistazo a la lista que aparece a continuación.

Honestidad

Sin duda, un líder debe ser muy honesto con sus acciones y con su equipo de trabajo, pues esto garantiza que el equipo va confiar plenamente en él y que el trabajo va fluir de manera adecuada. Así que cuando realices reuniones con tu equipo habla con total honestidad sobre el estado de los proyectos, y sobre lo que consideras que es lo mejor para la empresa. Si tienes que hacer algún reclamo o llamar la atención, no tengas miedo a hablar, siempre y cuando hagas esto con mucho respeto no vas a tener ningún problema. De igual manera, recuerda que los empleados prefieren tener un líder que los corrige, que les dice las cosas tal cual son y que les permite crecer como profesionales, a alguien que nunca tiene nada para decir y que nunca cumple con lo que promete. 

Seguridad

Es de vital importancia que te sientas seguro de tus capacidades y de lo que puedes lograr como líder, tu equipo necesita asegurarse de que tú eres el líder ideal y que con tu liderazgo todo va estar bien en la compañía. Recuerda que si te muestras seguro de ti mismo conseguirás no sólo que tu equipo confíe mucho más en ti, sino que también conseguirás que todo el equipo se contagie de tu seguiridad y que todos empiecen a dar lo mejor de sí mismos para que la empresa se posicione como una de las mejores.

Compromiso

Si quieres que tu equipo funcione y que todos crean plenamente en ti, necesitas demostrar que estás realmente comprometido con tu trabajo como líder. Es decir, necesitas conocer las necesidades y debilidades de cada miembro de tu equipo, hacer un seguimiento constante del trabajo que se realiza, realizar reuniones para resolver dudas y ofrecer soluciones a las dificultades que se presenten, reconocer y apreciar el trabajo de los empleados, ser un amigo incondicional que siempre estará ahí para ayudar, etc. Esto ademá de posicionarte como un excelente líder, hará que tus empleados te respeten de manera sincera y que valoren mucho más el trabajo que realizas en la compañía.

Habilidad para ejecutar proyectos

Tú eres el guía de tu equipo de trabajo, por lo tanto, necesitas tener muy claros tus objetivos y los medios que vas a utilizar para alcanzarlos. Esto te permitirá ofrecerle a tu equipo las pautas necesarias para realizar cada tarea de manera adecuada, y finalizar cada proyecto de manera exitosa. Igualmente, necesitas tener todas la disposición para ofrecerle ayuda a tu equipo cuando sea necesario y sobre todo, para resolver de la mejor forma las dificultades que se presenten en el camino.

Paciencia

Ten presente que los buenos resultados no los vas conseguir de la noche a la mañana, así que no te desesperes si las cosas no salen como esperas. Recuerda que lo más importante es que seas paciente y que en lugar de ahogarte de un vaso de agua, te enfoques en buscar soluciones adecuadas a cada uno de los problemas que se presenten en tu camino. Por otro lado, es importante señalar que si te estresas demasiado y dejas que esto te afecte más de lo normal, no sólo va ser más complicado que soluciones tus problemas, sino que vas causar que tu equipo también se desespere. Lo cual puede llegar a afectar de manera significativa la productividad. 

Empatía

Si quieres ser un buen líder necesitas comprender a tus empleados y saber cómo manejarlos de manera adecuada. Tus empleados necesitan a alguien que pueda ponerse en sus zapatos y entender por lo que están pasando, alguien que en lugar de juzgarlos o regañarlos tome algo de tiempo para hablar y proponer soluciones. Por su puesto que hay momentos en los que vas a estar muy enojado y probablemente no reacciones de la mejor manera, y es aceptable, en una empresa se puede manejar mucho estrés. Sin embargo, el diálogo siempre puede ser una gran arma para arreglar las diferencias y hacer que el ambiente laboral sea agradable para todos.

Respeto

Si tu relación con los empleados está basada en el respeto el ambiente laboral va ser más agradable para todos y será más fácil dialogar en momentos difíciles, sin contar que los empleados van a seguir tu ejemplo y también van a respetar a sus compañeros. Así que sin importar cuán enojado estés, evita a toda costa ofender o tratar mal a tus empleados, pues con esto lo único que vas a lograr es que se pierda cada vez más el respeto y que los empleados no hagan su trabajo de buena manera. Aparte de esto, recuerda que nunca hay necesidad de tratar mal a nadie, las cosas se pueden hablar con respeto y se pueden resolver de la mejor forma posible.

Humildad

Recuerda que el hecho de ser jefe o líder de tu equipo no te hace mejor o superior, tu eres simplemente una pieza más del rompecabezas. Claro que tu labor es muy importante y que sin tu ayuda probablemente el equipo no funcione como debería, pero este no puede ser un motivo para que hagas sentir a tus empleados inferiores. Es muy importante que les hagas saber a cada uno de ellos que su trabajo es muy valioso para la empresa y que estás muy agradecido de que ellos den lo mejor sí mismos para que la empresa pueda alcanzar sus metas. 

Por otra parte, cabe resaltar que tú eres un ser humano como cualquier otro y por lo tanto, puedes cometer muchos errores. Y esto no está mal, pues cada proyecto es un nuevo desafío y con el tiempo vas a ir perfeccionando tu desempeño, lo que está mal es que no reconozcas tus errores y que empieces a buscar culpables en otro lado. Ten presente que el hecho de admitir que te equivocaste no va causar que los empleados pierdan confianza en ti o que no te respeten, por el contrario, te va ser ver como una persona correcta, y honesta que está dispuesta a enmendar sus errores.  

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