En muchas ocasiones las entrevistas de trabajo no son lo que el candidato espera, pues no siempre los reclutadores están preparados para hacer las entrevistas y empiezan a hacer preguntas raras o fuera de lugar que pueden llegar a incomodar un poco al aspirante. Por esta razón, es muy importante que el aspirante se prepare para manejar de forma adecuada este tipo de situaciones y así su entrevista no sea tan incómoda.
En este sentido, a continuación queremos darte a conocer algunos consejos que te serán de gran ayuda para responder sin problema las preguntas raras en una entrevista de trabajo.
Responde con la mayor discreción posible
Si te hacen preguntas muy personales o que consideras que están fuera de lugar no tienes porque sentirte obligado a responderlas. Esto no significa que seas grosero o que te enojes y respondas de forma inapropiada lo que te preguntan, simplemente necesitas ser discreto con tus respuestas y no hablar de cosas que te hagan sentir incómodo. Si respondes de forma inteligente las preguntas le harás saber al reclutador que es necesario tener ciertos límites al momento de preguntar y que lo que realmente importa son tus capacidades como empleado y no tu vida personal.
En caso de que te hagan una pregunta que te sorprenda demasiado y que definitivamente no quieras responderla, no te desesperes y responde con otra pregunta. Por ejemplo, puedes decir “¿Por qué me está preguntado esto? La verdad, me sorprende un poco la pregunta” De este modo, no sonarás grosero y responderás de una forma muy inteligente, Lo cual puede generar una buena imagen de ti ante el reclutador, pues este se dará cuenta de que las preguntas que está haciendo no son las más apropiadas y que necesita cambiar el enfoque que le está dando a la entrevista.
Evita perder el hilo de la entrevista
Está bien que respondas algunas preguntas personales y que de por momentos hables de cosas que no tienen nada que ver con el trabajo, pero debes recordar que ese no es el principal objetivo de la entrevista. Pues lo que tu necesitas hacer en una entrevista es conocer un poco más la forma como funciona la compañía, mostrar tus capacidades como empleado y tener claro cómo se llevará el proceso de contratación.
Así que si el reclutador empieza a desviarse del eje de la entrevista y te hace preguntas que están completamente fuera de lugar, no tengas miedo a hacerle saber que estás ahí es para aplicar a un trabajo no para hablar de tu vida personal. Por ejemplo, puedes solicitar de una forma educada que si pueden entrar a hablar de los requisitos para obtener el puesto, de las funciones y responsabilidades que este implica, de las pruebas que siguen luego de la entrevista y del tiempo que tendrás que esperar para obtener una respuesta.
Mantén la calma
Sin importar el tipo de pregunta que te hagan o la insistencia del reclutador por conocer tu vida personal o hacer comentarios inapropiados, intenta mantener la calma. En primer lugar, no vale la pena enojarse y pelear con el reclutador por una mala actitud o un comentario malintencionado. Tu como aspirante necesitas demostrar que eres una persona educada que sabe manejar perfectamente este tipo de situaciones y que no se va salir de sus casillas por un simple comentario.
En segundo lugar, ten presente que en muchas ocasiones los reclutadores buscan probar un poco la actitud de los aspirantes ante situaciones incómodas y al mismo tiempo, buscan analizar los recursos que tienen para solucionar este tipo de situaciones. Así que analiza muy bien la actitud que tiene el reclutador y determina si lo que está haciendo es probarte o si definitivamente no tiene idea de cómo hacer una entrevista de forma adecuada.
No te dejes llevar por los nervios
Claro que es muy normal sentir nervios antes de entrar a una entrevista, pero debes evitar que estos te ganen y que te hagan cometer errores. Recuerda que si estás nervioso te va ser mucho más difícil responder de forma adecuada a las preguntas raras que te hagan en la entrevista, aparte de que puedes llegar a bloquearte y responder cualquier cosa o simplemente quedarte callado. Así que ten mucho cuidado con los nervios, intenta manejarlos de la mejor forma posible para que no te afecten al momento de hacer la entrevista.
En caso de que te sea muy complicado manejar los nervios tomate un té o una aromática antes de entrar. Intenta dormir muy bien el día anterior y sobre todo, mantén una actitud positiva. Ten presente que si tienes una buena actitud podrás tener la cabeza fría para superar los obstáculos que se te presenten durante la entrevista y al mismo tiempo, evitarás que el reclutador se dé cuenta de que estás muy nervioso y que se aproveche de esta situación.
Si crees que el reclutador ya cruzó un límite intenta terminar la entrevista lo antes posible
Si estás sintiendo muy incómodo y no quieres estar más en la entrevista, lo mejor que puedes hacer es buscar la forma de finalizarla lo más pronto posible. Eso sí, no tienes que ser maleducado y ofender al reclutador, simplemente puedes buscar el momento adecuado para decirle al reclutador que necesitas retirarte y que de todas maneras agradeces la oportunidad que te dió. Una vez le hayas dicho al reclutador que necesitas irte espera a que este te dé permiso de salir de su oficina y terminar la entrevista con buenos términos.
Eso sí, cabe mencionar que esto lo puedes hacer siempre y cuando te dés cuenta de que el reclutador está un poco equivocado contigo, que no muestra interés por tu perfil profesional y que no quiere darte información sobre el empleo, y que no está dispuesto a cambiar su actitud. Ahora tú también necesitas estar muy seguro de que ya no te interesa trabajar en dicho sitio y que no estás exagerando al abandonar de esta forma la entrevista.